martes, 31 de enero de 2017

modelos de argumentación

De los muchos argumentos que se suelen utilizar, los más frecuentes son: deductivos, inductivos,  por analogía, de autoridad, acerca de las causas y mediante ejemplos. Cada uno de ellos te ofrece un modelo de argumentación.


Argumentos deductivos.

Son aquellos en los cuales la verdad de las premisas garantiza la verdad de su conclusión. La cuestión es que muchas veces  las premisas son inciertas; en tal caso, la conclusión también lo será.   Podemos tener un argumento correcto o válido por lo que respecta a su forma, pero débil o claramente falso por lo que respecta a su contenido. Fíjate en los siguientes ejemplos:

a) “Todos los mamíferos son rumiantes. Mi perro es  mamífero. Por lo tanto, mi perro es rumiante.” (Argumento válido pero falso.)

b) “Todos los hombres son mortales. Sócrates es  un hombre. Entonces, Sócrates es mortal.” (Argumento válido y verdadero.)

c) “Los peces nadan. Las aves vuelan. Por lo tanto, los peces y las aves nadan  y vuelan.” (Argumento inválido.)

Los argumentos deductivos son muy frecuentes a pesar de que la deducción presenta dos puntos débiles. El primero de ellos ya lo hemos señalado: la validez de un argumento no nos garantiza su verdad; sólo si la deducción es correcta y las premisas verdaderas,  la conclusión será verdadera. El segundo es que, aun siendo válido y verdadero  un argumento,  el alcance de la conclusión es, muchas veces, limitado: nos dice poco más de lo que sabíamos.
Los argumentos deductivos pueden adoptar  la forma del Modus ponens (“Si p, entonces q. Se da p. Por lo tanto, se da q.”), del Modus tollens (“Si p, entonces q. No se da q. Por lo tanto, no se da p.”), del silogismo hipotético (“Si p, entonces q. Si q, entonces r. Por lo tanto, si  p entonces r.”), del silogismo disyuntivo (“ p o q. No se da p. Por lo tanto, se da q.”), del dilema (“p o q. Si p, entonces r y si  q, entonces s. Por lo tanto, r o s.”), de la reducción al absurdo (“Para probar p, supón lo contrario y, si en el transcurso de la prueba obtienes una contradicción, entonces niega lo que has supuesto.”), por contraposición ( “Si p, entonces q. Por lo tanto, si no q, entonces no p.”) … Existen argumentos deductivos que combinan varias formas simples. Si quieres distraerte con ellos, lee a Sherlock Holmes y te garantizo que no te aburrirás.


Argumentos por inducción.


La inducción nos permite obtener una conclusión universal  a partir de premisas singulares. Si bien la conclusión no se sigue deductivamente de las premisas, de alguna manera es apoyada por ellas.
El razonamiento científico que va de las observaciones a las teorías es considerado inductivo.
Solemos distinguir entre  inducción completa e inducción incompleta. En la primera se parte del conocimiento individual de todos los casos que componen un universo y se obtiene una conclusión válida para la totalidad. Imagínate una clase de 30 alumnos de 2º de Bachillerato D. Cada uno de ellos cursa la asignatura de Filosofía. Si escribimos 30 premisas con el nombre correspondiente de cada alumno, al final podemos escribir como conclusión que “Todos los alumnos de 2º de Bachillerato D cursan Filosofía.” Como hemos recogido todos los casos, nuestra inducción es completa. Pero la mayoría de las veces no es así.
Cuando la inducción es incompleta, sostener la conclusión es, cuanto menos arriesgado: ¿Cómo podemos garantizarla? Sigue el consejo de Karl  R. Popper: intenta buscar contraejemplos. Cuanto más te cueste encontrarlos, más fuerte es tu argumento.     
El argumento inductivo es perfectamente lícito, pero en los casos de inducción incompleta no existe una garantía acerca de la conclusión; aunque las premisas aportadas sean verdaderas. Así, la inducción no puede ser justificada sobre bases estrictamente lógicas. Sobre este asunto te recuerdo la historia escrita por B. Russell sobre un pavo inductivista. ¿Recuerdas? Aquel que comía invariablemente  a las nueve de la mañana en la granja  avícola y, tras días y días de regularidad, se decidió a concluir: “Siempre como a las nueve de la mañana”. Pero, llegó la víspera de Navidad y…

Argumentos por analogía.

 Como ya sabes, en toda analogía se establece una comparación entre dos cosas y se acentúan sus semejanzas. Los argumentos por analogía no requieren que los ejemplos utilizados sean absolutamente iguales, pero sí que existan similitudes relevantes.
Un famoso argumento por analogía –conocido como “argumento del diseño”- trata de  establecer la existencia de un Creador del mundo: tal y como podemos inferir la existencia de un arquitecto cuando nos encontramos ante un edificio bonito y bien construido, podemos inferir de la belleza y el orden del mundo la existencia de un Creador.
 David Hume al analizar este argumento manifestaba: “Piense cuán amplio es el paso que se ha dado al comparar las casas con el universo y al inferir de la similitud en algún aspecto  una similitud en sus causas.”. A juicio de este filósofo,  la  analogía que nos ocupa constituye un argumento débil por dos razones: una casa es parte de un conjunto mayor, mientras que el universo es el mayor de los conjuntos. Por otro lado, las casas requieren creadores; pero, de acuerdo con lo que sabemos, el universo como un todo puede contener las causas dentro de sí mismo. ¿Te animas a construir un argumento por analogía? ¿Qué tal  uno entre la Tierra y  un ser vivo?


Argumentos de autoridad.

En muchas ocasiones no podemos juzgar por nuestra propia experiencia y necesitamos acudir a otros para informarnos. Aunque procuremos acudir a fuentes competentes, no deja de ser un asunto arriesgado a la hora de basar en ello nuestra conclusión.
¿Cuándo están cualificadas las fuentes? Las fuentes competentes pueden ser autoridades, grupos y libros. Pero incluso las personas más preparadas, los grupos  especializados y los libros prestigiosos, pueden estar equivocados,  carecer de imparcialidad o resultar incompletos.
En muchas cuestiones de filosofía es difícil encontrar fuentes incuestionables: Aristóteles no estaba de acuerdo con Platón, ni  Hegel con Kant, por citar sólo unos ejemplos. Podemos utilizar sus argumentos, pero no convenceremos limitándonos a citar.
Con esto no quisiera que pensaras que  debemos descartar tales argumentos; pero sí que los utilices             con cautela y que,  cuando tropieces con alguno de ellos, lo analices con rigor. Fíjate en los ejemplos siguientes; ambos son argumentos de autoridad, pero no tienen la misma “autoridad”.


a)      “Las organizaciones de derechos humanos dicen que algunos presos son maltratados en Guantánamo. Por lo tanto, algunos presos son maltratados en  Guantánamo.”
b)      “Amnistia Internacional, en su informe anual del 26 de mayo de 2005, pide el cierre de Guantánamo. En este informe aporta fotografías de abusos a  presos, recoge testimonios  y las declaraciones de McClean, portavoz de la Casa Blanca,  quien  califica los abusos de “sucesos aislados”. El informe de Amnistía Internacional  también recoge otro dato: el Gobierno de  Estados Unidos ha restringido la aplicación de los Convenios de Ginebra. Por todo ello, Amnistía Internacional considera que algunos presos son maltratados en Guantánamo.”


¿Sabrías decir  por qué el segundo argumento tiene más autoridad que el primero si ambos concluyen igual?


Argumentos acerca de las causas.

Cuando tratamos de explicar por qué suceden las cosas empleamos este tipo de argumentos, ya que establecen una correlación  entre estados de cosas y causas. Por ejemplo, para averiguar si la dieta influye en el estado de salud, los médicos nutricionistas idean pruebas acerca de  los hábitos alimenticios. Luego pasan estas pruebas a una parte  representativa de la población y, entonces, comprueban cuál es la relación entre dietas y salud. En estos resultados basarán sus argumentos de manera que éstos sólo serán rigurosos si lo son las pruebas.
 Pero, no basta con afirmar  que una causa produce un efecto, sino que también hay que explicar por qué es así. De lo contrario, podemos establecer correlaciones que no son más que meras coincidencias. Y esto es lo que debemos evitar.
Imagínate que alguien dice: “Mientras leía el libro que me prestaste sobre el insomnio, me quedé profundamente dormido. Por lo tanto, el libro es tan bueno que me hizo dormir.”
¿Prueba este ejemplo que el libro sea la causa del sueño? ¿Qué tipo de prueba llevarías a cabo para comprobarlo?
Cuando elabores un argumento acerca de las causas, ten  en cuenta dos cosas. En primer lugar, que la mera correlación no establece una relación de causa y efecto; en segundo, que la causa no siempre es única.
Te animo a que construyas tu propio argumento. Puedes reflexionar acerca de las causas del fracaso escolar o, si lo prefieres, acerca de por qué algunos países tienen un mejor sistema educativo que el nuestro. Tampoco estaría de más que, desde una posición autocrítica, reflexionaras acerca de tu propio rendimiento académico intentando establecer cuáles son las causas de tus mejoras.


Argumentos mediante ejemplos.

Estos argumentos ofrecen uno o varios ejemplos en favor de una generalización.  Fíjate en el siguiente:

“El derecho de las mujeres a votar fue ganado sólo después de una lucha.”
“El derecho de las mujeres a asistir a la Universidad fue ganado sólo después de una lucha.”
“El derecho de las mujeres a la igualdad de oportunidades en el trabajo está siendo ganado sólo con la lucha.”
“Por lo tanto, todos los derechos de las mujeres son ganados sólo después  de luchar.”

¿Cuántos ejemplos son necesarios para alcanzar una conclusión? ¿Cuántos más ejemplos aportemos resultarán más fiables las conclusiones? Lo importante no radica en la cantidad de ejemplos, sino en su importancia. De esto saben bastante quienes realizan encuestas públicas: de poco serviría entrevistar a la mayor parte de la población si se deja fuera de la muestra a un sector recalcitrante.
Cuando construyas tus propios argumentos no confíes en el primer ejemplo que te venga a la cabeza. Además, no te dejes engatusar por la apariencia de algunos argumentos, como el siguiente:

“Compre su vehículo en nuestro concesionario. Cientos de clientes ya han confiado en nosotros. Usted será el próximo cliente  satisfecho.”

¿Se te ocurre alguna objeción al respecto?




miércoles, 25 de enero de 2017

RASGOS LINGÜÍSTICOS DE LAS ARGUMENTACIONES




Rasgo es una peculiaridad o  propiedad distintiva.Los rasgos lingüísticos más utilizados y efectistas para defender una idea son los siguientes:

1.    Redundantes: se repite la misma idea.

2.    Marcadores u organizadores de tiempo y espacio (1º, 2º, 3,º..., en primer lugar...) Deixis temporales y espaciales (aquí, en este país, allí, ahora, …)

3.    En el ensayo: 1ª y 2ª persona. En los textos periodísticos y de ensayo se trata de involucrar al lector. Todos sabemos que..., todos ustedes tienen la experiencia..., cualquier lector podrá descubrir...

4.    Los párrafos son amplios. Predomina la oración compuesta (causales, consecutivas, temporales, etc.). Dan razones y causas a la argumentación.

5.    Se usa el modo indicativo como modo de la realidad y el tiempo más utilizado es el presente, intemporal o sentencioso: la democracia es un sistema...Actuar de forma dictatorial conduce al fracaso de los pueblos

6.    Predominan los adjetivos: explicativos (indican una explicación de algo que se ha dicho) y especificativos (concretan), oraciones de relativos, oposiciones, y otros complementos del nombre.

7.    Cuanto más enunciativas sean es más objetivo el texto. Si hay otros tipos hay más presencia del autor (subjetivo): dubitativas, desiderativas, interrogativas retóricas…

8.    Predomina el léxico abstracto; y dependiendo de la materia habrá diferentes tecnicismos. Pero cuando son subjetivas se utilizan recursos poéticos metáforas, comparaciones y, sobre todo, ironías.

martes, 24 de enero de 2017

El ocupante

 En esta novela del Catalán Angel Burgas nada es lo que aparenta.De hecho, parece una novela juvenil de instituto, con chico rebelde pero de buen fondo como protagonista y resulta ser otra cosa, una historia en la que la fantasía y la imaginación desempeñan un papel crucial.

El arranque es muy prometedor: Alberto huye a la carrera de dos compañeros de instituto que lo persiguen con sus motos. Para salvarse de ellos decide entrar en Can Serra, una fábrica abandonada y misteriosa que es objeto de todo tipo de leyendas y habladurías por parte de la gente del pueblo. Lo que no puede saber es que allí dentro habita realmente un monstruo, alguien capaz de hacer lo peor para sobrevivir. De momento, nada más.

martes, 17 de enero de 2017

Razones científicas para leer más de lo que leemos.

 Hoy, en la fantástica libroteca queremos dejar patente la importancia de la lectura para el desarrollo de la mente. Ignacio Morgado Bernal ,  director del instituto de neurociencias de la Universidad Autónoma de Barcelona y  autor del libroCómo percibimos el mundo: una exploración de la mente y los sentidos”, nos explica, hoy mismo, en una columna del País que " para mantener saludable nuestro cerebro, la mejor actividad es la lectura".

( transcripción del artículo completo).

El informe La lectura en España 2017, encargado por la Federación de Gremios de Editores (FGEE), alerta de que los españoles no conseguimos aumentar nuestro nivel de lectura, pues estamos estancados en cifras que indican, según el último barómetro del CIS, que cerca de un 40% de los ciudadanos no leyó ni un libro en 2015. Ante esta situación el Gobierno parece tener en ciernes un Plan Nacional de Fomento de la Lectura incluido en el llamado Plan 2020 de acción cultural. Démosle pues al Gobierno y su Ministerio de Cultura argumentos científicos, particularmente desde la neurociencia, para seguir adelante con ese plan y llevarlo a cabo con éxito.

La lectura es uno de los mejores ejercicios posibles para mantener en forma el cerebro y las capacidades mentales
La lectura es uno de los mejores ejercicios posibles para mantener en forma el cerebro y las capacidades mentales. Es así porque la actividad de leer requiere poner en juego un importante número de procesos mentales, entre los que destacan la percepción, la memoria y el razonamiento. Cuando leemos activamos preferentemente el hemisferio izquierdo del cerebro, que es el del lenguaje y el más dotado de capacidades analíticas en la mayoría de las personas, pero son muchas más las áreas cerebrales de ambos hemisferios que se activan e intervienen en el proceso. Decodificar las letras, las palabras y las frases y convertirlas en sonidos mentales requiere activar amplias áreas de la corteza cerebral. Las cortezas occipital y temporal se activan para ver y reconocer el valor semántico de las palabras, es decir, su significado. La corteza frontal motora se activa cuando evocamos mentalmente los sonidos de las palabras que leemos. Los recuerdos que evoca la interpretación de lo leído activan poderosamente el hipocampo y el lóbulo temporal medial. Las narraciones y los contenidos sentimentales del escrito, sean o no de ficción, activan la amígdala y demás áreas emocionales del cerebro. El razonamiento sobre el contenido y la semántica de lo leído activan la corteza prefrontal y la memoria de trabajo, que es la que utilizamos para resolver problemas, planificar el futuro y tomar decisiones. Está comprobado que la activación regular de esa parte del cerebro fomenta no sólo la capacidad de razonar, sino también, en cierta medida, la inteligencia de las personas.
El razonamiento sobre el contenido y la semántica de lo leído activan la corteza prefrontal y la memoria de trabajo
La lectura, en definitiva, inunda de actividad el conjunto del cerebro y refuerza también las habilidades sociales y la empatía, además de reducir el nivel de estrés del lector. En ese sentido debemos resaltar el excelente trabajo de revisión del novelista y psicólogo Keith Oatley, de la Universidad de Toronto, Canadá, recientemente publicado en la revista científica CellPress y titulado Fiction: Simulación of Social Worlds (Ficción: Simulación de mundos sociales), destacando que la literatura de ficción es la simulación de nosotros mismos en interacción. Tras un riguroso y elaborado repaso de datos y consideraciones sobre psicología cognitiva, Oatley concluye que ese tipo de literatura al ser como una exploración de las mentes ajenas hace que quien lee mejore su empatía y su comprensión de los demás, algo de lo que estamos muy necesitados. Esa conclusión es además avalada por neuroimágenes, es decir, por datos científicos que exploran la actividad cerebral relacionada con ese tipo de emociones. La ficción que incluye personajes y situaciones complejas puede tener efectos especialmente beneficiosos. Así y como ejemplo, un trabajo recientemente publicado muestra que la lectura de Harry Potter puede disminuir los prejuicios de los lectores.
La ficción que incluye personajes y situaciones complejas puede tener efectos especialmente beneficiosos
Todo ello sin mencionar la satisfacción y el bienestar que proporciona el conocimiento adquirido y cómo ese conocimiento se transforma en memoria cristalizada, que es la que tenemos como resultado de la experiencia. El libro y cualquier lectura comparable son, así, un gimnasio asequible y barato para la mente, el que proporciona la mejor relación costo/beneficio en todas las edades de la vida, por lo que debería incluirse en la educación desde la más temprana infancia y mantenerse durante toda la vida. Cada persona debe elegir el tipo de lectura que más le motiva y conviene. Los niños deben ser estimulados a leer con lecturas adecuadas a su edad y los mayores deben procurarse todo el auxilio que requieran sus facultades visuales para poder seguir leyendo y manteniendo en forma su cerebro cuando envejecen. Un motivo añadido para que los mayores sigan leyendo es la plausible creencia de que no somos verdaderamente viejos hasta que no empezamos a sentir que ya no tenemos nada nuevo que aprender.

lunes, 16 de enero de 2017

Clases de argumentación según el lenguaje




Si cogierais cualquier periódico ,revista o mismo las reseñas bibliográficas que de vez en cuando enviáis .Si escucharais al vecino o al amigo opinando de lo que sea, os daríais cuenta de la importancia de saber argumentar.En la mayor parte de las conversaciones nos encontramos ante la tarea de "convencer".De hecho hay miles de trabajos que lo requieren: desde un  comercial ,a un crítico de cine o a un abogado...Sin embargo, con frecuencia, somos testigos de personas discutiendo y   defendiendo a la vez la misma idea, de ahí la necesidad de  ejercitarnos en este estudio.

Hoy hablaremos sobre las clases de argumentación según el lenguaje :

 Humanísticos: con frecuencia son ensayos; pueden ser largos o breves. Pueden aparecer fragmentos de un libro de ensayo o artículos publicados en revistas o periódicos normales.
    • Periodísticas: En los diarios o periódicos, al margen de las noticias y las crónicas, que solo dan información, el resto de los artículos tienen la forma de argumentaciones. Pueden ser: 
·         Editorial: no está firmado porque es la opinión del colectivo, de la empresa o del director del periódico. Hablan de un tema de actualidad. Normalmente es tesis-argumento. Es menos subjetivo que la columna y el artículo de opinión.
·           Columna: se diferencia del artículo de opinión en que está escrito en columna. Es muy subjetivo y el autor escribe habitualmente en el mismo lugar del periódico.
·          Artículo de opinión: suele ser más extenso que la columna y suelen ser colaboraciones de autores conocidos, no habituales del periódico.
    • Legales: Las sentencias de los jueces y los argumentos de los abogados. Se utiliza siempre el método inductivo.
    • Científico-técnicos: igual que los humanísticos pero con temas de ciencia, informática, salud, ecología... Si es puramente científico estará escrito en tercera persona, y será lo más objetivo posible; si es un artículo de opinión será más subjetivo y tratará de involucrar al lector en lo que dice.

viernes, 13 de enero de 2017

La importancia de la argumentación para la adquisición de las competencias lingüísticas.

Convencer es y ha sido siempre la característica primordial de los  grandes líderes de la humanidad.  Persuadir, conseguir que una persona crea algo o se decida a hacer algo es algo innato en algunos , pero,  por lo general, es algo que tenemos que aprender.

Argumentar consiste en ofrecer una serie de razones o de pruebas en apoyo de una conclusión.Cuando tratamos de convencer de algo (tesis) a alguien mediante una serie de argumentos. Como no todos los puntos de vista son iguales, y a menudo las personas discutimos acerca de ellos, es bueno informarse acerca de qué opiniones son mejores. Al hacerlo, podremos formarnos nuestra propia opinión, juzgar con mayores garantías de acierto y, en la medida de lo posible, evitar errores.
Los errores en la argumentación se denominan falacias. Algunos de ellos son tan comunes y tentadores que tienen sus propios nombres. Ni que decir tiene que las falacias se pueden cometer tanto voluntaria como involuntariamente. Pero como  para detectar una falacia hay que entender cuál es la regla que incumple, veamos primero los buenos argumentos y las reglas que éstos siguen. Por cierto, en todo argumento hay que distinguir entre premisas y conclusión. Las premisas son las afirmaciones mediante las cuales ofrecemos nuestras razones; la conclusión es el enunciado a favor del cual estamos dando esas razones.



  • Estructura:
  • Método deductivo: se parte de la tesis y luego se pasa a argumentar lo que se ha dicho.
  • Método inductivo: se parte de los argumentos (hechos) para llegar a la conclusión.
  • Método reiteración lineal: la tesis a defender se va repitiendo durante todo el texto alternando con los hechos.
  • Método de doble encuadre: se parte de la tesis, se dan los argumentos y se vuelve a dar la tesis al final. Es el más habitual .
  • Tipos de Argumentos:
  • 1.Hechos científicos: desde que en 1492 Colón llegase a América las tribus...
  • 2.De autoridad: se emplean mucho en textos humanísticos y periodísticos. Puede ser una persona, una civilización...: Como decía Aristóteles, según los antiguos griegos...
  • 3.Ad hominem: mi amigo me cuenta..., ese muchacho que aparece...
  • 4.Colectivo: todo el mundo utiliza este producto, la mayoría de los lectores eligen...
  • 5.Causa/consecuencia: se utilizan para convencer de la tesis con una demostración lógica. Está demostrado que los efectos del alcohol en la conducción...
  • 6.De experiencia personal: llevo treinta años dando clase y...
  • 7.Argumentos en contra o contraargumentos: Se explica por qué sería falso lo contrario de lo que se dice en la tesis.
  • 8.Ejemplificaciones y comparaciones… Usar casos conocidos o inventados para demostrar nuestra idea.
  • Puede haber más formas de argumentos. 



Mi primer beso por Ariadna Álvarez Tizón

Título: Mi primer beso

Autor:Beth  Reekles

Editorial: Destino

Resumen del argumento:
Es una chica que tiene un amigo y con el que tiene mucha confianza. Él tiene un hermano mayor el cual se enamora de la chica y con la cual comienza una relación a escondidas. Cuando el amigo se entera, se enfada y ellos al final se separan por motivos de estudios y van a intentar una relación a distancia.

el tema:
El amor a distancia y contra el mundo.

Valoración :
Con un lenguaje y un vocabulario claro y sencillo, el libro engancha y te persigue hasta el final.Merece la pena ya que trata sobre una preciosa historia de amor.




martes, 10 de enero de 2017

Algo tan sencillo como twitear te quiero por Antía Fernández Rodríguez

Título: Algo tan sencillo como twitear te quiero.
Autor: Blue Jeans
Editorial: Planeta
Resumen del argumento:
Este libro habla de todo lo que ocurre en los pasillos de la Universidad,
 dónde se conocen varios chicos y algunos se enamoran.
Valoración:
Es un libro juvenil que engancha mucho y se centra en aventuras amorosas  por lo que se lo recomendaría a alguien joven ya que es bonito e  interesante.
 “Creo que vale la pena leer porque los libros ocultan países maravillosos que ignoramos, contienen experiencias que no hemos vividos jamás. Uno es indudablemente más rico después de la lectura.                                     (Adolfo Bioy Casares)




lunes, 9 de enero de 2017

No tengo miedo por Laura Borrajo Fernández



Título: No tengo miedo
Autor: Niccolò Ammaniti   
Editorial: Anagrama
Resumen del argumento:
Cuando el protagonista, Michele, un niño de nueve años descubre el horrible secreto que esconde la pequeña aldea de Italia en la que vive, se ve en la necesidad de contárselo a alguien. Pero… ¿a quién?
El libro no es más que un recordatorio de cómo la inocencia de un niño se transforma en bestialidad de un hombre adulto, ya que Michele es demasiado joven para comprender que la gente siempre acaba siendo diferente de lo esperado y demasiado ingenuo para saber que hay secretos que matan.
Valoración:
Es un libro que me encantó y con el que he disfrutado mucho. Me trae infinidad de recuerdos.
Me parece admirable la fuerza que tiene Michele y lo valiente que es al enfrentarse a todas las personas para tratar de salvar la vida de su amigo. Creo que muchos de nosotros deberíamos aprender de esa actitud e imitarla.

Harry Potter y las reliquias de la muerte por Diego Fernández Blanco


Título: Harry Potter y las reliquias de la muerte
Autor: J.K. Rowling.
Editorial: Salamandra.
Resumen del argumento:
Después de morir Dumbledore y varios miembros de la orden del Fénix, Harry se dispone a terminar la misión que le encomienda su antiguo director y debe hacerlo cuanto antes, ya que Voldemort tiene el control del mundo mágico y la varita de saúco en su poder. Harry debe destruir los horrocruxes para acabar definitivamente con el señor tenebroso. Para ello tiene la ayuda de sus amigos y de los que luchan contra la oscuridad.
Valoración:
Me parece un libro increíble, con muchos detalles y personalidad propia.Es muy entretenido y engancha desde el primer instante. Idóneo para cualquier público,  ya que aunque seas adulto te hace soñar e inculca valores como la lealtad y amistad.


Drácula por Uxía Martínez Do Nascemento



Título: Drácula
Autor: Bram Stoker
Editorial: Everest
Resumen del argumento:
Jonathan Harker se desplaza a Transilvania para encargarse de explicar al conde Drácula el proceso de compra de una casa en Londres. En el viaje le desean suerte, le dan crucifijos y se persignan.
Cuando llega al castillo, el conde es amable y hospitalario con él,  pero a medida que pasan los días, Jonathan se da cuenta de que está solo y que nunca aparece para comer.
El conde le pide que se quede más tiempo y Harker decide escribir en un diario  todo lo que le pasa mientras está allí. Poco a poco descubre cosas que le hacen pensar que algo malo va a suceder…
Valoración:
Es un libro que nada más comenzar a leerlo querrás  continuar para saber qué sucederá.
La sola mención del nombre de Drácula despierta en nosotros la fascinación por lo desconocido, el miedo a la muerte y a los muertos.